viernes, junio 15, 2012

Hermanos Parisi: de vuelta del colegio




Un comentario más localista. Chile es un país de habladores, (por fineza, no quise decir charlatanes) de predicadores de esta vida y la otra. De comentaristas de la realidad como los ministros y autoridades que en vez de dar soluciones “comentan la situación” en la tele, de políticos que siempre dicen “hay que hacer”, en vez de decir “voy a hacer”, o de opinólogos de la televisión que hablan solamente porque “tienen boca”. Tomando como referencia las palabras del escritor colombiano Fernando Vallejo, digo que nuestra vida diaria está llena de impostores. En vez de mentir, como siempre, con palabras, ahora mienten con teoremas y ecuaciones.
                
Los economistas y hermanos Antonino y Franco Parisi tienen un programa de televisión y predican en cuanto medio de comunicación encuentran sobre economía y temas similares. Tienen todos los grados académicos habidos y por haber. Han ocupado unos cuantos cargos académicos y empresariales importantes, muy creíbles hasta que…la realidad les pasa la cuenta.

Administraban un par de colegios a través de su empresa Inversiones Palermo lo que indicaba que por sus antecedentes profesionales serían un modelo de gestión. Pero no era así. Han debido de dejarlos por “mala administración y situación de deficiencia que vivían los colegios”. Declara al diario La Tercera, Antonino Parisi, quién reconoce no haber dedicado el tiempo necesario a la administración…requería mayor tiempo de dedicación y de proridades…lamenta no haber entregado el suficiente tiempo lo que califica como un error. ¿Que demuestra esto? Que esto de la gestión va más allá de los títulos y doctorados que se tengan…requiere actitud, esfuerzo y dedicación. Hacer las cosas que hay que hacer.

Ahora quién les va a creer. Pasaron de exitosos iluminados a la simple categoría de “predicadores”, como muchos. No olvidemos que otro premiado y máximo exponente de gestión empresarial, el señor Alcalde, de la multitienda La Polar, terminó siendo un fraude y en la cárcel. Esta casta de predicadores es más grande de lo que se cree y lo peor es que la gente les cree, porque con un nivel intelectual que apenas les llega para entender las comedias y al reality “Mundos opuestos”, estos señores cargados de medallas les parecen venidos del Olimpo a enseñar a las pobres masas incultas de su notable sabiduría. Y no es así. No basta con hablar y hablar. Las cosas no se dicen, se hacen, porque al hacerlas se dicen solas. Así de simple.

¿Por qué opino de esto? Porque se me ocurrió y para avisarles a los mencionados hermanos que no veré más su programa. Cómo les voy a creer si ahora se dan mil vueltas para justificarse. Ya saben…les haré zapping.

No hay comentarios.: